viernes, 31 de enero de 2014

TEST DE BENDER, PREDICTOR DEL REZAGO EDUCATIVO

Uno de los tests psicológicos más empleados en la práctica clínica y psicopedagógica es el test gestáltico visomotor elaborado por Lauretta Bender en 1938. Este instrumento de medición psicológica originalmente se construyó para diagnosticar problemas en la percepción gestáltica y desde su construcción hasta la década de los 60’s su uso fue casi exclusivo con pacientes psiquiátricos adultos. A partir de esta década y de la publicación del libro"el test gestáltico visomotor para niños" de Koppitz (1963) su mayor utilización  fue con niños escolares en diversos países tales como: Canadá, Dinamarca, Alemania, Gran Bretaña, Japón, India, Israel, Chile, España, Noruega, Argentina y México.





Su uso con niños escolares se ha llevado a cabo tanto para evaluar su nivel de maduración en la percepción visomotriz como para predecir el nivel intelectual, los problemas en el aprendizaje, la disfunción cerebral (mínima) y los problemas emocionales. La gran cantidad de estudios realizados con el test visomotor de Bender permite ver que contiene la  suficiente validez como para ser una de las técnicas más empleadas para el Psicodiagnóstico.



ÉXITO O FRACASO EN EL APRENDIZAJE

Hay factores diversos que influyen en que un niño logre un buen aprendizaje o no, entre ellos está el desarrollo del lenguaje, la percepción visual, la capacidad de seriación, la evocación de  información y la formación de conceptos. La edad, actitud, sexo y condición social y familiar de los niños, esta influencia puede ser en proporciones variadas. El logro de un niño en la escuela depende de la interacción y presencia  de todos estos factores.
Sin embargo, hay pruebas psicológicas que evaluando un sólo aspecto del desarrollo humano pueden arrojarnos un posible predictor de cómo será el desempeño del niño en la escuela. En específico el test de Bender indica que su aplicación al momento de ingresar a Primaria es el idóneo (5 1/2 o 6 1/2 años) para poder identificar ciertos problemas o que presentará un aprendizaje normal en su escolaridad.
Los niños con dificultades en la escuela suelen tener bajas puntuaciones en el Test de Bender, pudiendo ser niños con capacidad mental limitada o niños con inteligencia normal pero con problemas específicos de aprendizaje. Aunque el test arroje un mal funcionamiento real de la percepción viso-motriz, si los niños son dedicados, tienen una buena desarrollo del lenguaje, si poseen una buena motivación, si no tienen problemas de comportamiento y si tienen unos padres y maestros que les ayudan, pueden superar los problemas perceptivo-motores y convertirse con el tiempo en buenos alumnos.

Para ello, es muy importante que haya una  enseñanza individualizada en la clase, además de una aplicación repetida del Test de Bender para llevar a cabo un registro del ritmo de maduración del niño para establecer expectativas más realistas y determinar si requiere del apoyo de un especialista.


Descripción del Test de Bender

jueves, 16 de enero de 2014

APLICACIÓN DE UN TEST: PRIMERA FASE "EL Rapport"

La aplicación de una prueba psicológica o  test requiere la preparación de un escenario adecuado, es decir, la generación de condiciones idóneas tanto físicas como psicológicas (en el paciente) para obtener mejores resultados, en cuanto a la información que se quiere recabar.


Respecto a las condiciones físicas es sencillo disponer de un espacio cómodo, acogedor, atractivo a la vista, aislado del ruido e interrupciones o contar con el material requerido para la prueba. Sin embargo, las condiciones psicológicas que tienen que ver con el estado del paciente: se encuentre relajado, en confianza, dispuesto... son mucho más complicadas de lograr. El sólo hecho de saberse "evaluado" genera un estrés en la persona, por ello, el psicólogo ha de poner en práctica el llamado "rapport" antes de iniciar su prueba y mantenerlo durante el tiempo que implique.



De acuerdo con Aragón (2002), el rapport consiste en crear una atmósfera cálida y de aceptación, de tal forma que el entrevistado se sienta cómodo, tranquilo, comprendido y a salvo y se  comunique de manera abierta sin temor a ser juzgado o criticado. El  entrevistador tiene la responsabilidad de hacer que el entrevistador participe y  lo vea como una persona que puede ayudarlo y que es digna de confianza. El  rapport está basado en la confianza, el respeto y la aceptación mutuos.
Menciona también que la construcción del rapport se encuentra siempre amenazada por los elementos psicológicos del entrevistado, la inexperiencia del entrevistador o la  interferencia de factores contextuales; sin embargo, es preciso enfatizar que  para que la información que se va a obtenerse en la entrevista sea fructífera, la construcción del rapport es indispensable. El rapport se facilita con algunas actitudes del entrevistador, entre ellas menciona mantener un contacto visual apropiado, una  postura relajada, natural y centrada en el entrevistado; un lenguaje espontáneo,  amistoso y con un tono cálido y expresivo; aceptación incondicional y empática.

Más especial la situación al trabajar con niños cuando se trata de crear un rapport, con quienes se tiene que actuar con mayor naturalidad y conseguir toda su confianza para no inhibir la expresión de sus pensamientos o emociones y obstaculizar la obtención de información.

Sugerencias para la técnica del Rapport

Lograr crear un rapport es una habilidad compleja que debe desarrollarse poco a poco, con mucho esmero, constante práctica,  requiere la observación sistemática de las actitudes, que como entrevistador se aplican y tienen un efecto "seductor" en la otra persona, aquellas que logran una conexión o sintonía.


Conoce los orígenes del rapport  CREADORES DEL RAPPORT